A la hora de adquirir un pájaro es preciso tener en cuenta algunas cosas:
-En primer lugar y más importante, ser conscientes de que lo que vamos a comprar no es un juguete o un adorno que podemos recoger en un cajón y abandonarlo hasta que nos vuelva a apetecer su uso sino que son seres vivos. Los pájaros son animales igual que los demás en el sentido de que nos van a exigir atención y cuidados. Y como no son un juguete, les va la vida en ello. Nos ocuparan algo de espacio en casa para dotarles de una jaula adecuada y un poco de gasto económico (no mucho). Queremos recalcar esto, porque es habitual que cuando a los padres no les gustan demasiado los animales y el niño pide insistentemente una mascota se suela optar por un pájaro. Está no es una mala elección siempre y cuando se le explique lo que supone tener un ave en casa y el compromiso que va a suponer también para él.
-Un pájaro adecuadamente cuidado nos puede llegar a vivir muchos años. Este aspecto debe hacernos pensar bien si de verdad deseamos adquirirlo, ya que podemos llegar a tenerlo con nosotros mucho tiempo, con lo que ello ocasiona.
-Ya que no es un juguete, un pájaro mancha. Además de la suciedad que se deposita en el fondo de la jaula, también salpicara algunas semillas fuera e incluso alguna plumita por alrededor de su jaula y eso puede ocasionar molestias a quien lo cuida o al resto de integrantes de una unidad familiar. Es algo a asumir si lo llevamos a casa.
-Hay especies en las que (normalmente los machos) cantan muy bonito, fuerte, alto y prolongado por lo que puede resultar molesto para algunas personas.
-Por último, indicar que las plumas de las aves en general, desprenden un polvillo que no se aprecia visualmente. Si no somos escrupulosos con la limpieza, aunque no es habitual, hay personas que no lo toleran pues les provoca alergia.
Una vez analizados estos aspectos y teniendo claro si seremos capaces de cumplir con todos estos puntos analizados en este párrafo, elegiremos el tipo de pájaro, su sexo y si será conveniente llevarnos un único ejemplar o una pareja. Para ayudarte en tu eleccion ( si estas pensando tener uno) o en sus cuidados ( si ya lo tienes en casa) nos centraremos aqui por el momento, en las 5 especies más habituales en los domicilios gijoneses. Existen evidentemente muchas más, pero es indudable que éstas son las que por méritos propios están mas extendidas entre nosotros.
CANARIO
Los canarios son unos pequeños pajaritos de multitud de colores (hasta más de 250 diferentes) que con el paso de los años se han convertido en uno más de muchos hogares, los cuales nos hemos ido acostumbrando a verlos en escaparates de las tiendas de animales, en balcones, en la casa de un amigo o como no… en nuestro propio hogar. En definitiva es una de las mascotas estrella que nos deleita con su prolongado y alegre trino.
Jaula y accesorios
Son poco exigentes nuestros amigos los canarios en este aspecto ya que puedes estar alojados en jaulas de unas dimensiones mínimas de unos 40 x 20 x 30 cm . También pueden estar en jaulas mayores o incluso en grandes voladeras del tamaño de una habitación.
Así mismo, la jaula llevará incorporados 2 comederos, un bebedero, 2 reposaderos o palos colocados estratégicamente en la jaula, lo más alejados posibles entre sí para obligar al canario a saltar de un lado a otro ejercitando sus músculos, pero no lo suficientemente cerca de los barrotes (paredes de la jaula) como para que el canario al girar se roce con la cola en ellos y se la estropee. Además evitaremos que debajo de los palos haya un comedero o bebedero para evitar que caiga sobre la comida o agua de bebida los excrementos del animal al posarse encima de ellos en el palo. También es preciso la adquisición de un bañera y una pastera. Imprescindible que la jaula lleve una rejilla por encima de la bandeja (base de la jaula) donde depositará las heces y los restos de comida y cáscaras, para evitar a través de esa rejilla separadora que el animal tenga contacto directo con los excrementos y restos de comida o cáscaras y así evitar así que el pájaro enferme. La limpieza es fundamental en este sentido.
En principio la jaula no necesita más accesorios ya que cualquier otro utensilio no servirá más que para restar espacio a la jaula, estorbar o provocar accidentes con nuestro amigo (columpios, escaleras, espejos…)
Alimentación
La alimentación de un canario está compuesta por:
-Una buena mezcla de semillas (mixtura), compuesta por alpiste, cañamón, negrillo, nabina, con opción a añadir perilla blanca, pipa pequeña, linaza y avena. Es importante ver la fecha de caducidad de los envases al adquirirla para evitar que estén pasadas y enranciadas, así mismo debe estar bien limpia sin restos de polvo y ser lo más fresca posible.
-Diversas frutas y verduras como son: manzana, pepino, brócoli, naranja, lechuga e incluso alguna hierba silvestre tales como cardo, alsine o brotes frescos de árboles frutales.
-También se aconseja poner en la jaula un hueso de sepia o gritt mineral en un comedero de forma continua.
Cuidados básicos
A la hora de adquirir un canario hay que tener en cuenta lo siguiente:
-Imprescindible ubicar la jaula en un mismo lugar siempre, bien en interior o bien en exterior. Pero lo que no es conveniente es sacarlo y meterlo a la ventana cuando a nosotros nos parezca que puede ser bueno porque sale el sol o porque hace buen tiempo. Hay que elegir o dentro o fuera pero sin moverlo de sitio. Los canarios toleran bien el frío por lo que la opción de tenerlo en la calle no es un problema siempre y cuando lo adaptemos progresivamente a la temperatura.
-No exponerlo a corrientes de aire directo o someterlo a cambios bruscos de temperatura.
-El sitio donde lo ubiquemos estará bien iluminado con luz natural pero cuando haga demasiado calor evitar los rayos del sol directo.
-Evitar la cocina y el baño como sitio de ubicación por los humos y vapores que se concentran habitualmente en esos sitios.
-El lugar de ubicación siempre será cómodo y accesible a nosotros.
-Higiene: En el fondo de la jaula (la bandeja) colocaremos un papel secante, de periódico, viruta de madera o piedra de gato que cambiaremos 1 ó 2 veces a la semana para evitar olores y acumulación de excrementos y restos de comida.
-Es conveniente aunque no imprescindible, cambiar el agua del bebedero a diario para que el canario tenga agua fresca y nueva todos los días.
-Colocar una bañera en la jaula al menos dos veces por semana para que el canario pueda bañarse y así pueda mantener un plumaje perfecto, completo y brillante.
-No dejar que las uñas y pico crezcan demasiado para evitar enganchones en los barrotes o puerta de la jaula, hecho que podría terminar en un serio accidente provocando incluso la muerte del animal.
-Evitaremos en todo momento soltar al canario por la casa, ya que los cristales de las ventanas, ventanas abiertas por descuido, espejos, chimeneas, adornos, plantas tóxicas (perejil…) o trasera de armarios constituyen un serio peligro para él (golpes, accidentes, fugas…)
-Antes de darle verduritas, es conveniente lavarlas bien con agua por si llevaran insecticidas, al menos cuando estas sean compradas en la frutería y después de lavarlas secarlas bien antes de dárselas.
-En una misma jaula podremos meter una pareja de canarios que incluso podrán reproducirse fácilmente pero nunca dos machos ya que las continuas peleas estarán aseguradas llegando a veces a provocar la muerte de uno de ellos.
-Por último, una vez al mes es conveniente lavar la jaula y desinfectarla.
PERIQUITO
El periquito es un pájaro de pequeño a mediano tamaño. Mide unos 19 cm. y pesa 35 g. aunque los ejemplares modernos son más grandes que los originales. Las alas son largas en proporción a su cuerpo, ya que miden 10 cm. El ejemplar salvaje es de color verde, con la cabeza amarilla y la espalda cubierta de ondas oscuras. Sin embargo, en el ámbito doméstico hay muchas variedades de distintos colores, excepto el negro y el rojo.
Su pico es anaranjado, curvado hacia abajo. La zona superior del pico, la cera, donde tienen los orificios nasales, es azulada en los machos, y morrón clara en las hembras. Tiene dos dedos hacia delante y dos hacia atrás con los que agarra perfectamente las ramas o los barrotes. Estas son aves muy sociables, inteligentes, son juguetonas y aptas para tenerlas en casa como mascota. Se han aclimatado perfectamente a la vida con humanos, tanto que los periquitos que podemos adquirir en las tiendas de mascotas, ya no tienen la capacidad de vivir por si solos en libertad, por lo que es completamente desaconsejable “liberarlos”. Para que estén en buenas condiciones y nunca cambien su alegre forma de ser, es muy importante tener ciertos cuidados con ellos. Los Periquitos australianos pueden hacer mucho ruido cuando son mas de una pareja. A continuación te daremos varias recomendaciones para un mejor bienestar de esta bella ave.
Comportamiento:
Es un pájaro gregario. En estado salvaje viven en grandes bandadas para evitar el ataque de los depredadores. En cautiverio también les gusta estar acompañados o al menos en pareja, ya que son muy sociables y afectuosos. Se asean y se rascan mutuamente y son tan fieles que no dejarán que un extraño cumpla estas funciones.
Es fácil de domesticar y puede aprender a silbar melodías e incluso a decir alguna palabra con un poco de entrenamiento, sobre todo si es joven. Las hembras se consideran más mandonas y exigentes que los machos, y por lo general son aves mucho más fuertes. No mueven la cabeza tan constante como los pericos machos, ni cantan mucho. Los machos tienden a ser más juguetones, los pericos hembras parecen serias y de mal humor en algunas ocasiones.
Su expresión corporal puede ayudar a saber cómo se encuentra. Si se asea y se acicala las plumas o se rasca la cabeza, significa que está agusto. También suele esconder una de sus patas en el plumaje y gorjear suavemente cuando está tranquilo. En cambio, si estira las alas y las patas probablemente necesita ejercicio.
Cuando se asusta se pone tieso con las alas totalmente pegadas al cuerpo. Si levanta las plumas, hinchándose como una bolita, puede que esté pasando frío; por el contrario, si tiene calor, separará las alas del cuerpo levemente abriendo un poco el pico.
Alimentación:
El periquito es un ave cauta, desconfiada ante lo desconocido, por eso no nos debe extrañar que, ante la entrada de un nuevo alimento en su jaula, el animal lo observe continuadamente sin comerlo, con el tiempo lo probará y lo incorporará a su dieta. No se deben alimentar con comidas para ser humano, como arroz, chocolate, jugos, fritos, cosas de paquete, leche, etc. Es importante también mantener calcio a su alcance.
Como premio se suele utilizar el panizo (mijo en rama), pues les encanta picotear. Hay que ser prudentes y no darles demasiado porque contienen muchas calorías, una barrita al mes es suficiente. También podemos ofrecerle como golosina un poco de galleta normal. Nunca bajo ningún motivo deberían de permanecer más de 2 horas sin nada que comer y beber, pues su metabolismo es muy rápido. Por último, el periquito necesita un hueso de sepia o jibia para obtener los minerales esenciales necesarios, limarse el pico y las uñas.
En su jaula, siempre debe haber agua fresca, esta debe renovarse cada día y una vez a a semana limpiar concienzudamente tanto la jaula, como los comederos y bebederos.
Mantenimiento y cuidados:
La jaula del periquito debe estar resguardada del frío, en una habitación que se mantenga entre los 20-25 ºC. Debe ser metálica, rectangular y de grandes dimensiones para que tenga libertad de movimiento y pueda ejercitarse. Los barrotes tienen que estar dispuestos en sentido horizontal para que puedan trepar por ellos. Se puede colocar una bandeja con arena de gato para que haga sus necesidades.
También es recomendable dejar que el periquito salga de vez en cuando y vuele libremente por la habitación. Las ventanas deben estar cerradas y con cortinas, porque puede chocarse contra ellas. Se le puede llegar a enseñar a subirse a nuestro dedo u hombro y a disfrutar del vuelo en su habitación.
Son aves muy sociables y lo más recomendable es que vivan con otro periquito. Si de todas maneras decidimos adquirir solo un ejemplar, deberemos proporcionarle mucha compañía humana y entretenimiento, integrarlo como miembro de la familia, o la soledad y el aburrimiento podrían repercutir gravemente en su salud. La mejor pareja es la formada por un macho y una hembra. Ésta atacaría a su acompañante gravemente si es de su mismo género.
Dado su carácter curioso y social, junto a su gran energía, los juegos son muy importantes para el. Los juguetes le proporcionan un gran entretenimiento, siendo los mas habituales escaleras y cascabeles. En su vida silvestre, imitan los sonidos de otros animales y con un poco de paciencia, algunos ejemplares llegan a balbucear alguna palabra humana, sobre todo si son jóvenes y están solos, aunque nosotros siempre recomendamos que se tenga una pareja.
DIAMANTE MANDARÍN
Esta pequeña ave presenta unos doce centímetros de altura. Se caracteriza por su grueso pico, bastante corto y fuerte y de un llamativo color rojo. El plumaje es básicamente gris azulado, con unas características líneas negras en la cola y en las alas. Las plumas del pecho son de color blanco. Presenta unas características zonas blancas a ambos lados del pico y unas delgadas líneas negras verticales.
Tienen clara su diformidad sexual, así que no es difícil obtener una pareja auténtica. En su forma silvestre el macho tiene una coloración gris parduzca. El vientre es más claro con plumas marrones con puntitos blancos y en el pecho tiene pequeñas estrías blancas y negras, de ahí que también se les denomine Zebras. La cola es negra con puntos blancos en las mejillas que tienen una gran mancha anaranjada. El pico es rojo y las patas son anaranjadas. La hembra tiene el manto completamente gris, sin manchas ni puntitos y no tendrá nunca esos coloretes tan característicos de los machos. Además el pico es naranja y las patas las diferenciaremos por ser de una tonalidad más pálida.
Carácter o temperamento
Muy alegre, activo y muy agradecido. El Diamante mandarín es un pájaro extremadamente social, tanto que no puede vivir mucho tiempo en soledad, por que se moriría de pena, necesita estar en continua convivencia con otros mandarines. Así, se aconseja a adquirir dos mandarines, o dos hembras o una pareja, ya que dos machos estarían en continua pelea.
Es un pajarito simpático y divertido, de muy fácil crianza en un ambiente domestico. Sin embargo, los diamantes mandarines son aves desconfiadas y no nos dejaran acercarnos a ellos tanto como otras. Necesita hacer ejercicio volando, no tan solo yendo de palo en palo, por eso es conveniente alojarles en un lugar no muy estrecho, cuanto mas grande mejor. La falta de ejercicio puede producir en la hembra retención de huevos, es decir el huevo no podrá pasar por el ovioducto, esto es peligroso, sobre todo si no nos damos cuenta. Si observamos a la hembra embolada (hecha una bolita), con los ojos semi cerrados y con respiración acelerada, puede que uno de los motivos sea la retención de un huevo.
Alimentación
La base de alimentación del diamante mandarín son las semillas, principalmente mijo y alpiste, mezcla que es suficiente para su mantenimiento. Para variar un poco se les puede ofrecer panizo en rama que les encanta y algo paniset. Su alimentación se puede completar con frutas y verduras frescas. Las frutas más apropiadas son naranjas, manzanas, peras (ricas en yodo) y hortalizas como la zanahoria, que pueden cortarse para hacer una especie de ensalada que regaremos con miel. Les encanta la lechuga y espinacas una vez a la semana les ira bien. Es importante saber que estas aves se acostumbran a comer los distintos tipos de semillas cuando son pollos. Si la dieta del pollo no fue variada, tendremos un ave mala comedora, que sólo aceptara unos pocos o incluso un único tipo de semilla.
En la época de la cría o la muda, es importante que los pollos en crecimiento dispongan de una fuente de proteínas, como el lino, la colza, el cáñamo y la nigeriana. Nuestras aves agradecerán que de vez en cuando les demos algún insecto o lombriz, y el suministro de estas presas es especialmente importante durante la cría. Puede dárseles también alimentos como queso o yema de huevo en forma de pasta y pan remojado en leche. En cuanto a la bebida hay que cambiársela todos los días, el pájaro deberá tener agua fresca a su disposición siempre que lo desee. Es muy recomendable añadirles en la dieta minerales. El «grit» (mezcla de piedrecitas con minerales variadas) es una solución completa que además les mejora la digestión. Incluso alguna jibia de sepia, que picotearán con avidez.
Cuidados básicos
Deberemos proveerles de un recipiente con agua para que realicen su baño diario, algo fundamental en todas las especies de pájaros. Es mejor evitar los baños nocturnos, por lo que sacaremos el recipiente de la jaula cada noche. Y hay que limpiar el agua de la bañera ya que los Diamante suelen beber de ella.
Estos pájaros son muy precoces, y pueden criar ya a la edad de tres meses, aunque en cautividad no se recomienda cruzarlos hasta los nueve. Son igualmente muy prolíficos, pudiendo efectuar un gran número de puestas al año (el récord en cautividad esta en 19 puestas de modo sucesivo) aunque no es recomendable permitirles que lleven a cabo más de tres puestas anuales.
Este pájaro se siente tan feliz en una jaula como en una pajarera. Es un ave que se adapta bien a su hogar si es lo suficientemente espacioso. Se recomienda una jaula de unos 50 cm de largo por 35 de ancho y 35 de profundidad, para permitir que las aves realicen el suficiente ejercicio como para mantenerse sanas, siendo estas medidas mínimas. Son animales que disfrutan mucho con pequeños vuelos cortos, por lo que cuanto más grande la jaula mucho mejor para ellos, ya que suelen moverse bastante por ella curioseándolo todo.
La jaula debe de contar con dos o tres perchas. Como siempre es preferible que las perchas tengan un grosor variable para que el pájaro ejercite las patas. El número de bebederos y comederos tendrá que ser suficiente para que no haya peleas, aunque debido al carácter gregario de estas aves esto es infrecuente, y suele bastar con uno de cada. El suelo puede recubrirse con papel o algún sustrato comercial. Es recomendable que la jaula cuente con una bandeja deslizante en el suelo para facilitar la limpieza. Podemos adornar la jaula con plantas en macetas (cuidado, que no sean venenosas) porque estas aves suelen respetar las plantas que coloquemos.
AGAPORNIS
Dependiendo de la especie, el Agaporni varia de tamaño entre 14 y 16 centímetros. Es un ave que llama la atención por el llamativo colorido de su plumaje y es fácilmente reconocible por su cola corta y redondeada. Una de las características de su morfología más apreciada es su pico, que posee una grande fuerza. La versatilidad de sus patas hace que los Agaporni puedan utilizarlas indistintamente como pies y como manos, por eso no es de extrañar que las utilicen, además de su pico, para alimentarse y también para andar por la jaula.
No es fácil distinguir los machos de las hembras. Los creadores más experimentados logran hacerlo a partir de los huesos pélvicos, que están más alejados en las hembras, pero este método solo tiene un 30% de eficacia. En algunos casos, la hembra es más grande que el macho. Los Agaporni son muy ruidosos y les gusta tener la atención de todos a su rededor. Aunque no sean habladores como los loros, pueden emitir algunos sonidos humanos y palabras cortas. La muda de plumaje es muy común en esta especie. Las mutaciones son tantas que se hace difícil descubrir a un ave con el plumaje original. Hay más de 40 tipos de coloraciones conocidos.
Jaula y accesorios
Es de gran importancia tener en cuenta varios factores a la hora de elegir una jaula, de ello depende la felicidad y calidad de vida de nuestros agapornis.
Antes de adquirir una debemos fijarnos en varias cosas. El tamaño es tan sencillo como cuanto más grande mejor. Para una pareja una buena medida sería de 1m. de largo, 0,5 m. de ancho y 0,5 m de alto. Realmente estas medidas se pueden recomendar para aves que no salen nunca de la jaula. Las aves que tenemos en pisos, debido al problema que se tiene de espacio podrian adaptarse a vivir en jaulas de 0,50m de largo, aunque seria bueno entonces permitirles salir a ejercitarse.
Siempre hay que tener en cuenta que dentro de ella colocaremos, perchas, comederos, juguetes etc, por lo cual si al final se queda pequeña, el ave tendra problemas y entonces habra que realizar otra inversión. Nunca dejarnos engañar si intentan venderos una jaula diminuta. Eso esta bien para otro tipo de pájaro, pero no para un agapornis. Es conveniente que siempre sea más larga que alta ya que los vuelos suelen ser en sentido horizontal. En cualquier caso la altura siempre nos daría la opción de colgar accesorios, pero siempre hay que tener en cuenta que la base sea más grande que la altura. La forma de la jaula nunca sera redonda. Es una jaula que les provoca inseguridad ya que no tienen un punto de referencia donde ellos puedan sentirse tranquilos (esto es aplicable a todo tipo de pájaros). Todos los puntos de la jaula son iguales lo que les provoca estrés, que puede ser puerta de entrada a otras enfermedades. No les permite trepar bien y son aves que les gusta mucho hacerlo. No son buenas para la cría, pues al ser redondas el nido no tiene ningún punto de apoyo.
La Jaula rectangular es la jaula más indicada. Esta debería ser lo más grande posible y en la medida de lo posible la estructura rectangular, sin ningún tipo de buhardilla, tejadillo ni similar. La posición de los barrotes debe ser en sentido horizontal, o al menos dos de los lados de la jaula para permitir que trepen agarrándose con patas y pico. La distancia entre barrotes nunca más de 1,5 cm. para evitar que puedan intentar meter la cabeza entre ellos y morir por asfixia o inanición. Idealmente si queremos criar en un futuro, la jaula debería tener 2 puertas. La primera puerta para administrarles alimentos y agua y la otra para poder poner un nido exterior (que no quitará espacio dentro de la jaula y desde el cual se podrán controlar a las crías sin molestar a los padres en el caso de reproducirse). Tener especial cuidado en que el cierre sea seguro pues aprenden a abrir tanto las puertas que ascienden como las de pestaña. Se pueden usar para asegurarlas pestillos ó pequeños mosquetones.
Sobre si poner rejilla en la parte inferior o no, sobre este tema hay grandes discrepancias. Siempre la limpieza de una jaula sin rejilla inferior es mucho más sencilla, pero los agapornis tienen total acceso a picotear restos de comida que puedan estar contaminados por sus heces. Nosotros creemos que las ventajas higienicas de la rejilla superan a sus inconvenientes cuando hablamos de pájaros, dado que no son animales que se pasen la vida en el suelo.
Nunca colocaremos la jaula cerca de puertas o ventanas que puedan dejar pasar corrientes de aire. Lo mejor es en un rincón que les permita tener dos partes de la jaula pegadas a la pared para darles seguridad y bienestar. El lugar debe estar libre de humos y no usar productos de limpieza ni ambientadores cerca de nuestras aves.
Mínimo una vez a la semana desinfectaremos completamente, es decir, barrotes, suelo, juguetes, perchas…. con un estropajo y bayeta (comprados para este menester), agua templada y lejía diluida. Enjuagar después muy bien para evitar los restos y secar minuciosamente (esto último evitará la excesiva humedad, que produce enfermedades y el hecho de que los hongos se reproduzcan a sus anchas).
Alimentación
Su alimentacion debe ser seca ( pienso o mixtura) y tambien fresca (frutas y vegetales). De preferencia, recomendamos el pienso de alta calidad, pues de las mixturas (y esto vale para todas las psitacidas) suelen escoger lo que mas les gusta ( que suele ser lo que mas grasas tiene) y dejan el resto. Esto no es bueno para nada y asi no conseguimos una buena alimentacion balanceada. Si les das mixtura y observas esto, te recomendamos que valores cambiar a un buen pienso.
Seca:
Pienso específico comercial o mixtura de semillas. Alpiste, mijo blanco, avena pelada, níger y semillas de girasol. Tambien semillas de cáñamo, aunque en poca cantidad.
Fresca:
Frutas y vegetales. Por ejemplo: Pimiento rojo y verde, achicoria, apio, diente de león, berro, naranja, manzana, pera, plátano, kiwi, calabacín, berenjena, fresa, frutos de temporada, higos y maiz dulce fresco. En menor medida ( unas tres veces a la semana) se puede dar alguna leguminosa en verde (judía verde o guisante, legumbres germinadas) o brotes de soja o alfalfa frescos (un pellizquito sobre cada comedero).
Como suplemento y golosina, espigas frescas de cereales o gramíneas, flores de acacia o de trébol y alguna rama fresca y tierna de las mismas acacias (¡Ojo a las variedades espinosas).
En temporada de celo y crianza es muy importante el aporte mineral. Si no lo toman por ellos mismos, espolvorearlo sobre su alimento. Alimentos prohibidos serán la patata, aguacate y cebolla.
Premios:
Podemos encontrar gran variedad de golosinas en el mercado, desde las ya tan clásicas barritas de miel hasta galletas. Se pueden hacer incluso de fabricación casera, con unos palos de madera impregnados en miel (Si es natural mejor) y rebozados en semillas.
Juguetes y complementos
Uno de los mayores errores es llenar la jaula con múltiples juguetes, pues le quitamos espacio a nuestras aves para moverse a sus anchas. Es preferible ponerles menos e ir cambiándoselos. Son animales muy curiosos y un juguete nuevo les atrae a la larga su atención, si cuando se cansan de él lo sustituimos por otro y retiramos el primero, volveremos a conseguir estimularlo y pasado algún tiempo repetimos la operación pero volviendo a introducir el antiguo lo volverá a aceptar como si fuese nuevo.
Existen en el mercado muchos tipos especialmente diseñados para ellos (acrílicos, de madera, columpios, campanas, cuerdas, escaleras).
Podemos utilizar los caseros cómo grandes botones, tapones de corcho, anillas y tubos de plástico, palillos de dientes, rollos de cartón, trozos de madera, saquitos…
Los espejos no son recomendables ya que esta demostrado que psicológicamente no les son beneficiosos.
Perchas limauñas: Son irregulares y rasposas por lo que nuestros agapornis pueden ejercitar perfectamente sus articulaciones, además permiten el afilamiento de uñas y pico y se pueden colocar en vertical y en horizontal. Son de larga duración.
Perchas de ramas naturales: Actualmente en el mercado hay una gran variedad para comprar.
Se pueden hacer de fabricación casera, eso sí, antes de introducirlas en la jaula debemos lavarlas y desinfectarlas minuciosamente. Terminan rompiéndolas por lo que cada cierto tiempo hay que sustituirlas.
Perchas de plástico: Son las que habitualmente vienen incluidas en la compra de cualquier jaula. Son totalmente regulares, con lo cual no ejercitan sus patas y con ellas no pueden limarse ni uñas ni pico, pero son de larga duración.
Los comederos son sobre gustos, los de acero inoxidable son de fácil limpieza pero ocupan espacio dentro de la jaula. Los comederos externos de pestaña en plástico, deben poder fijarse bien seguro, pues si tienen holguras, pueden terminar sabiendo sacarlos de su sitio dando la opción a una posible escapada.
Bebederos: Los habituales tienen el inconveniente de la rapidez con que se ensucia el agua.
Siempre podemos situar un segundo especialmente diseñado para hamsters para que aprendan a beber de él y cuando se observe que lo realizan con normalidad retirar el primero.
Muchas personas ponen los nidos como un accesorio más dentro de la jaula para resguardar al pájaro del frío, o bien solamente para verlos entrar y salir. Muchas veces por el hecho de ponerlo estamos incitando al pornis (si es hembra) al celo, poniendo desesperadamente huevos y produciendo su desgaste. En otras ocasiones si tenemos dos miembros dentro de la jaula puede incitarlos a pelearse entre ellos por dominar ese territorio. Por lo que solamente se recomiendan los nidos en el caso en que se quiera criar.
Comportamiento
Podemos saber si nuestro Agaporni o inseparable está triste, contento, sociable, agresivo o tranquilos por su comportamiento. A continuación enumeraremos algunos de los comportamientos más comunes de nuestros agapornis:
Contento: Estar activo, curiosear, acicalarse el plumaje, emitir sonidos alegres, saltar constantemente de un palo a otro, bañarse, jugar con sus juguetes. En conclusión mostrarse activo.
Tranquilo: Cuando el pájaro hace estiramientos con las patas, se posa con las plumas ahuecadas en el palo, bostezos y cuando están en su percha con la cabeza hacia atrás con los ojos abiertos.
Triste: El pájaro está muy apagado, apenas se mueve, no quiere que le molesten, se muestra poco sociable, no come apenas. Ojo! si se pasa asi todo el dia seguramente será sintoma de algun problema de salud. Consulta a tu veterinario.
Sociable: Acicalarse las plumas unos a otros, se dan de comer unos a otros, se ponen muy juntos en las perchas, parlotean entre ellos constantemente.
Agresivo: Picotazos, levantar la cabeza y agitar las alas emitiendo ruidos constantes, peleas, se lanzan a su adversario con el fin de pegarle un picotazo. Los que los conocemos bien sabemos cuando están así simplemente escuchando su grito corto y alto que emiten en señal de amenaza o queja.
A los agapornis no les gusta estar solos y por tanto es aconsejable mantenerlos en grupos o como mínimo en pareja. Sin embargo son un mito cosas que se oyen sobre esto, como que se mueren si estan solos. No es correcto. El problema es que son aves muy sociables y necesitan desarrollar vinculos fuertes con un compañero y relacionarse con otros individuos. Debido a que mucha gente no tiene el tiempo necesario para proporcionarles compañia por estar fuera de casa (trabajo, estudios etc..) que seria deseable, es por eso que recomendamos tenerlos en pareja, al tratarse de aves no muy grandes y de bajo mantenimiento. Esto soluciona el problema de su aburrimiento, depresión y complicaciones de salud por una falta de relaciones y atención social adecuadas. Ademas, a la gente le suele gustar precisamente de estas aves su comportamiento amoroso hacia su pareja. ¿por que privarles de ello?.
NINFAS O CAROLINAS
Si te gustaria un pájaro un poco mas grande, que se acerque mas a un loro, que uno mas pequeño que los antes vistos, la simpática y cariñosa Ninfa podría ser una buena opción. Requieren menos espacio que los loros y su coste y mantenimiento es mas reducido. Las ninfas o carolinas son apreciadas en todo el mundo debido a su naturaleza amable. Son fáciles de criar, apacibles, y les encanta que las acaricien. Emiten un sonido mas suave y menos ruidoso que el de los loros. Fáciles de domesticar, y como decimos, de bajo costo y fáciles de mantener, aunque necesitan sus controles veterinarios y cuidados como cualquier otro pájaro por supuesto. Constituyen una mascota ideal para principiantes que les gusten los loros y cacatuas (de hecho son de la familia de estas últimas).
Comportamiento
Se trata de un ave relativamente tranquila siendo más conocida por su capacidad de silbar que de hablar. Pueden llegar a desarrollar la capacidad de emitir sonidos por imitación, pero no de hablar tal y como lo harían sus parientes los loros.
Su aturaleza juguetona y divertida, más su pequeño tamaño las convierten en una mascota muy ideal, especialmente cuando han sido criados a mano.
Gracias a su belleza, su buen comportamiento y su capacidad de adaptación son muy apreciadas por los amantes de las aves. Además de gran inteligencia procesan un enorme afecto por sus propietarios.
Son muy sociales y requieren interacción regular con las personas con el fin de satisfacer su naturaleza sociable.
Los pollitos alimentados a mano o papilleros y aquellos que son manejados a menudo son más fáciles de domesticar.
Es importante habituarlos a las actividades diarias en el hogar. Coloque la jaula en la zona de la casa donde la familia pase la mayor parte del tiempo.
Proporcionar enriquecimiento ambiental es fundamental para reducir el aburrimiento evitar el riesgo de picaje, agresión u otros problemas de comportamiento. Son inteligentes y curiosos y se entretienen fácilmente con juguetes sencillos y les encanta explorar su entorno.
No se debe permitir el acceso sin restricciones en casa ya que pueden existir numerosos peligros. Deben permanecer en su jaula cuando no estén directamente supervisados por sus propietarios y/o alojarlos en una habitación tranquila y segura.
Alimentación
Una dieta basada sólo en semillas no es una dieta correcta. Desde el punto de vista nutricional se trata de una dieta desequilibrada con alto contenido en grasas.
Debemos ofrecerle también una amplia variedad de alimentos frescos desde el principio como verduras, hortalizas, frutas, pasta, arroz o semillas germinadas. Este tipo de alimentos deben constituir el 20-25% de la dieta. Además, cuando se le ofrece una mezcla de semillas, las ninfas normalmente escogen las semillas que tengan el más alto contenido de grasa, desechando el resto de la mezcla. Si se acostumbran a eso, será muy difícil hacerlas aceptar un cambio para una dieta mejor más adelante.
La mejor opción para alimentarlas será una dieta basada en un pienso específicos de calidad para loros pequeños. Estos piensos son nutricionalmente completos y evitan que escojan sólo aquellas cosas que le gustan. El pienso deben representar hasta un 75% de la dieta. Las golosinas, deberán constituir como maximo sólo un 5% de la dieta. Disponemos de mezclas comerciales especialmente pensadas para psitácidas australianas. Las pipas no forman parte de la dieta natural de las ninfas y son muy ricas en grasas, con lo cual se puede prescindir de ellas totalmente o usarse solo como premio.
Deben disponer de agua limpia y fresca que les cambiaremos a diario.
Jaula y accesorios
La jaula debe ser tan grande como sea posible, de tal manera que le permita dar toda la vuelta sobre sí mismo con las alas abiertas sin tocar con los bordes de la jaula.
Construida de materiales resistentes a la fuerza de sus picos, duraderos y no tóxicos.
El fondo de la jaula debe contener una reja que evite el contacto con sus deyecciones y los restos de comida. Debemos mantener la jaula limpia.
Las perchas deberían ser de grosor y texturas variables coladas a distintas alturas.
Evite colocar las perchas directamente sobre los alimentos o el agua para evitar la contaminación.
Es preferible que tengan acceso a la luz natural evitando siempre las corrientes de aire.
Deben permanecer en su jaula o aviario siempre y cuando no exista una supervisión directa de sus propietarios.
Aquellos que permanecen sueltos sin supervisión corren el riesgo de accidentes, como la ingestión de toxinas, electrocución, ataques de otros animales domésticos, y ahogamientos.
Los juguetes deben ser resistentes, variados, sin partes pequeñas que puedan tragar y de materiales no tóxicos.
Algunas ninfas pueden requerir una luz tenue durante la noche con el fin de evitar los aleteos frenéticos y las vocalizaciones, sin un motivo previo.