El Museo del Pueblo de Asturias presenta una exposición que reúne más de cien fotografías pertenecientes a su colección en la que que se analiza la relación de las personas con los animales. La exposición esta abierta durante todo el año.

A través de estas fotografías podemos conocer nuestra relación con los animales y la consideración que tenemos de ellos. Vemos cómo su representación está en gran medida estereotipada y que a lo largo de los años se va manteniendo un mismo modelo de retrato con el toro, la vaca, el caballo, el salmón, etc. La imagen de los animales es una creación humana y, en este sentido, estas fotografías nos representan más a nosotros mismos que a los animales. Nos remiten a nuestros sentimientos humanos como el afecto, la vanidad, el orgullo, el cariño, el triunfo y el odio. En definitiva, los retratos fotográficos con animales sirven para explicar nuestro comportamiento, así como el cambio de costumbres y mentalidad durante los últimos tiempos en relación a algunos animales.

En la colección de fotografías del Museo del Pueblo de Asturias hay retratos de personas con vacas, toros, ovejas, cabras, caballos, asnos, salmones, lobos, osos, perdices, liebres, gallos de pelea, cerdos, perros, gatos, gallinas, etc. Los animales salvajes aparecen normalmente muertos y fueron fotografiados como trofeos de caza y pesca. Los más numerosos son los retratos con ganado vacuno, caballerías y, sobre todo, perros: perros de caza, perros pastores o perros de compañía, que aparecen junto a sus amos como uno más de la familia.

Los animales nos han acompañado inseparablemente a lo largo de la historia de la humanidad. Las primeras representaciones pictóricas y grabadas del hombre son de animales y muchas de las metáforas que utilizamos en la vida diaria están basadas en nuestra relación con los animales o nuestra percepción de ellos. Durante milenios han vivido con nosotros estrechamente. De ellos dependíamos para alimentarnos y vestirnos, para el trabajo y el transporte, etc. Algunos de estos usos han desaparecido en la sociedad occidental, sin embargo han aparecido masivamente otros, por ejemplo, el de animales de compañía.